Muchas comunidades del mundo viven en las cercanías de un río. El río se convierte en parte importante y vital para ellas; de él toman sus aguas para el consumo humano, y actividades agropecuarias, siembra de peces, recreación y turismo, etc. Sin embargo, la mayoría de empresas y las autoridades gubernamentales, pasan por alto esa relación. Queremos mostrar las formas en que la extracción de piedra y arena del río Lagarto nos impacta a las comunidades puntarenenses y guanacastecas.
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Nótese el desvío de la corriente recargada hacia la ribera de Puntarenas (fotos 1 y 2), trabajos que se lograron realizando movimientos en áreas fuera de la concesión (foto 3), mediante una acumulación de materiales en el cauce del río en zona aledaña a la vivienda de la "Finca la erensia" (foto 4).
La empresa Servicios Mecánicos de Miramar S.A. con cédula jurídica N° 3-101-146606 y representada por el señor Alvaro Carrillo Campos, recibió la concesión de acuerdo con la Resolución R-297-2007-MINAE del 15 de junio 2007, por un plazo de 4 años, para la extracción de 500 a 700 metros cúbicos de arena, piedra y grava durante 15 días al mes para un ritmo de extracción mensual de 31.250 metros cúbicos. El proyecto también incluye la instalación de un quebrador.
A las comunidades aledañas al río Lagarto, nunca se les tomó en cuenta durante la tramitación de los permisos, por lo que fueron sorprendidas al entrar en operación el proyecto, que no contempló en el estudio de impacto ambiental la existencia de pozos utilizados para consumo humano.
Los vecinos y vecinas, se organizaron de inmediato en el Comité Pro Defensa del Río Lagarto, y a través de continuas visitas, mediante bitácora fotográfica, fueron documentando las anomalías, irregularidades e impactos vinculados con la explotación del río.
También comprobaron que la empresa Servicios Mecánicos opera sin permisos municipales ni sanitarios, ya que los mismos fueron tramitados y obtenidos por la Constructora MECO S.A.. Entre ambas empresas se suscribió un Contrato de arrendamiento de maquinaria debidamente protocolizado y también un contrato de arrendamiento PRIVADO de la concesión otorgada, con cláusulas de confidencialidad, en la que Constructora MECO se encarga del proceso de extracción y comercialización de los materiales.
Debido a esta singular e irregular situación, miembros del Comité gestionaron desde junio la cancelación de permiso de uso del suelo y patente otorgados por la Municipalidad de Abangares y ante el MINAET la cancelación y la caducidad de la concesión otorgada a Servicios Mecánicos de Miramar S.A. Esas dependencias aún no resuelven las peticiones hechas por los representantes comunales.
Los daños ambientales debido a la explotación del río son muy variados y pueden consultarse con mayor detalle en el blog del Comité en la dirección http://comiteprodefensariolagarto.blogspot.com/.
Entre los impactos y alteraciones producidas por el proyecto se mencionan: la alteración de las captaciones de pozos utilizados para el consumo humano; falta de amojonamiento de la concesión; arrendamiento de la concesión a terceros; uso de maquinaria no autorizada; falta de medidas de seguridad laboral; instalación del quebrador en zona de protección hídrica; uso de agua del río Lagarto en el quebrador sin contar con concesión; estancamiento y represamiento del agua utilizada en el proceso industrial; lagunas de sedimentación poco eficientes; agua del efluente del quebrador con alto poder erosivo y turbiedad; caída de árboles por el socavamiento e inestabilidad de riberas del río Lagarto y de la quebrada Madre Vieja: alteración de zonas fuera del área concesionada; riesgo para viviendas localizadas en las riberas del río en el área concesionada; turbidez del río debido a los sólidos en suspensión; profundidad de extracción superior a 1,5 metros autorizados; construcción de lagunas mineras, fosos y pozas dentro del cauce; ampliación del lecho del río; acumulación de materiales en el cauce; represamiento de la corriente; pérdida de rugosidad del lecho; desecación del fondo del lecho por exposición directa al sol; lecho del río usado como carretera para transportar los materiales extraídos; derrames de hidrocarburos; impacto sobre la vida acuática; desaparición de algunas zonas de resumido natural del río; alteración de las actividades de recreación y turismo vinculadas con el río Lagarto; quema de vegetación aledaña al río para favorecer la extracción de bancos de material y en general el deterioro de la cuenca baja del río Lagarto y la afectación a otras empresas.
La extracción de arena, piedra y grava del río Lagarto cuenta con viabilidad ambiental otorgada por la Secretaría Técnica Nacional Ambiental a la empresa Servicios Mecánicos de Miramar S.A., mediante Resolución Nº 618-2005 SETENA del 29 de marzo 2005. Posteriormente, el 15 de junio 2007, mediante Resolución R-297-2007, MINAE, la empresa obtuvo la concesión para explotar el río durante 4 años. Según el estudio de impacto ambiental, la concesión abarca 16 hectáreas 0599,16 metros cuadrados y permite la extracción de 180 mil metros cúbicos de reservas estáticas y 52 mil metros cúbicos de reservas dinámicas anualmente aportadas. La cantidad de material extraído por día sería del orden de 500 a 700 metros cúbicos, durante unos 15 días por mes; para poder atender un mercado que llegará a ser del orden de los 10.000 metros cúbicos por mes de material triturado, cuando se logre estabilizar dicho mercado.
Una vez entrada en operación la concesión en octubre del año pasado, las reacciones de rechazo no se hicieron esperar y se acentuaron a partir de la entrada en operación del quebrador, localizado en la margen derecha del río Lagarto.
Los vecinos y vecinas reclaman que nunca se les tomó en cuenta y señalan, incluso que se les ignoró hasta en los archivos que constan en el Departamento de Aguas del MINAE, pues de previo al otorgamiento de la concesión respectiva, el 24 de noviembre 2006, mediante Oficio IMN-DA-3369-2006, el Director de ese Departamento, señor José Miguel Zeledón, indicó a la Dirección de Geología y Minas que “…de acuerdo a nuestros registros, no existen concesiones de agua dentro de la zona de extracción ni aguas debajo del río Lagarto que eventualmente podrían verse afectadas por la actividad de extracción de materiales de dicho río.” (subrayado no es del original).
Los y las vecinas de Costa de Pájaros, Lagarto, Morales, Orocú, Santa Juana, Judas, Malinche, Lourdes, Cocorocas, entre otros, integraron el Comité para la Defensa del Río Lagarto, y se han dedicado a tocar las puertas de las Municipalidades de Puntarenas y Abangares; ante esta última pidieron cancelar los permisos de uso de suelo y patente comercial otorgados. Adicionalmente, ante MINAE han presentado una solicitud de cancelación de concesión, la que aún no se resuelve, pues reclaman como ilegal el arrendamiento que hizo la empresa concesionaria a Constructora MECO S.A..
Filemón Alvarado Velázquez, de la Asociación Administradora del Acueducto que beneficia a 2689 personas distribuidas en 878 abonados de las comunidades de Costa de Pájaros, Morales, Camarita, Nicarao y Lagartos, hizo un llamado al presidente de la República de Costa Rica, Óscar Arias, para que en nombre del Programa Paz con la Naturaleza detenga las explotación minera del río Lagarto, antes que los daños sean irreversibles. “No pueden seguir poniendo en riesgo nuestra agua, porque de ella depende nuestra vida. Hay pozos conectados a 2 acueductos rurales en este momento, y otro más, de la comunidad de Malinche, está por integrarse”, advirtió el pescador vecino de Costa Pájaros.
Más información
http://comiteprodefensariolagarto.blogspot.com/
Filemón Alvarado tel. 2-678-8094, Acueducto ASADACOPA
Eduardo Ledezma, Acueducto Orocú y Santa Juana
Sigifredo Bolaños tel. 2- 638-1206 y 8-344-3235
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